Optimización de costes en Azure: Consejos y buenas prácticas
A medida que las empresas continúan adoptando la nube, una de las principales preocupaciones es la gestión y optimización de costes. En esta ocasión y continuando con la serie de podcasts y artículos que estamos dedicando a cloud FinOps, bajaré un poco más al detalle con varias recomendaciones acerca de cómo llevar a la práctica, sobre Azure, algunos de los aspectos que hemos venido comentando.
Azure, como una de las plataformas cloud más importantes, ofrece una gran cantidad de servicios y una gran flexibilidad, pero si no se gestiona de forma adecuada, los costes por su uso pueden aumentar de manera muy rápida. En este post, veremos cómo optimizar los costes en Azure sin comprometer el rendimiento ni la seguridad.
1. Elige el tipo de recurso adecuado
Azure ofrece una gran variedad de tipos de recursos, como máquinas virtuales (VMs), bases de datos, almacenamiento y otros servicios que se ajustan a diferentes necesidades. Para evitar gastos innecesarios, es fundamental seleccionar el tipo de recurso más adecuado para cada carga de trabajo. Algunas recomendaciones al respecto:
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Usa VMs de la capacidad adecuada: No todas las aplicaciones sobre máquinas virtuales requieren que éstas sean de una gran capacidad. Evalúa las necesidades de rendimiento de cada aplicación y selecciona el tipo de VM más apropiado. Puedes utilizar las herramientas de monitorización de Azure para ajustar la capacidad de las máquinas virtuales en función del uso real.
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Optimiza el almacenamiento: Azure ofrece varios tipos de almacenamiento (Premium, Standard, Hot, Cool, Cold, Archive). Selecciona el tipo que mejor se adapte a los datos que manejas. Por ejemplo, los datos a los que accedes frecuentemente deben estar en almacenamiento Hot, mientras que los datos raramente utilizados pueden estar en Archive, que es más económico.
2. Usa las instancias reservadas (Azure Reserved Instances)
Si tienes cargas de trabajo predecibles y de largo plazo, las instancias reservadas son una excelente opción. Al reservar capacidad por uno o tres años, puedes ahorrar hasta un 72% en comparación con los precios de pago por uso. Esto es particularmente útil para servicios como las máquinas virtuales, bases de datos y almacenamiento, donde los costes a largo plazo son más estables.
3. Apaga los recursos no utilizados
Uno de los errores más comunes en la gestión de la nube es dejar recursos en funcionamiento cuando no se están utilizando. Esto puede incluir máquinas virtuales inactivas, discos no asignados y servicios que no están en uso. Es importante conocer que Azure facilita la detección y eliminación/control de estos recursos:
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Usa Azure Advisor: Esta herramienta proporciona recomendaciones automáticas sobre cómo optimizar el rendimiento, la seguridad y los costes. Te notificará, por ejemplo, sobre recursos infrautilizados o inactivos que puedes apagar o eliminar.
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Programar el apagado de VMs y clusters de Kubernetes (AKS): Si sabes que ciertos recursos/servicios de computación solo se usan durante horas laborales, puedes programar que se apaguen/detengan automáticamente fuera de ese horario. Esto es especialmente útil para entornos de desarrollo o pruebas que no necesitan estar disponibles 24/7.
4. Escalabilidad automática (Autoscaling)
La escalabilidad automática te permite ajustar la cantidad de recursos que consumes en función de la demanda real de la aplicación. Azure Autoscale, por ejemplo, ajusta automáticamente el número de instancias de tu servicio en función de reglas predefinidas. Esto es particularmente útil para aplicaciones que tienen picos de uso, como sitios web durante campañas comerciales o eventos.
Por tanto, el uso de autoscaling te garantiza que no estés pagando por recursos que no necesitas durante períodos de baja demanda, pero que puedas atender picos de tráfico sin problemas.
5. Valora el uso de instancias Spot
Las instancias Spot de Azure te permiten aprovechar la capacidad no utilizada de la infraestructura de Azure a un precio mucho más bajo (hasta un 90% de descuento en algunos casos). Sin embargo, la desventaja es que estas instancias pueden ser reclamadas por Azure en cualquier momento cuando la demanda general de la plataforma aumenta, lo que significa que no son aptas para todas las cargas de trabajo.
Las instancias Spot son ideales para cargas de trabajo tolerantes a interrupciones, como:
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En ciertos casos de uso de procesamiento por lotes (batch processing), donde este tipo de tareas desatendidas puedan reanudarse en caso de ser interrumpidas, sin generar afectación de ningún tipo al negocio.
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Renderizado de gráficos o simulaciones que puedan reanudarse.
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Entornos de desarrollo y pruebas que no requieran alta disponibilidad y cuando no haya problema de incumplimiento de plazos debido a interrupciones.
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Cargas de trabajo distribuidas, como aquellas que se ejecutan en clústeres de Big Data o inteligencia artificial.
6. Revisa y ajusta la configuración de red
El uso que hagas a nivel de redes, también puede incurrir en costes considerables, especialmente si no se gestionan adecuadamente. Algunas maneras de reducir costes relacionados con la red incluyen:
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Optimización del tráfico de salida: Minimiza el tráfico entre diferentes regiones de Azure para reducir los costes de transferencia de datos. Alojar tus aplicaciones y bases de datos en la misma región puede reducir significativamente estos costes.
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Utiliza el balanceo de carga de manera eficiente: Configura correctamente el uso de Azure Load Balancer y otras herramientas de balanceo de carga, para evitar sobrecostes innecesarios en la gestión del tráfico.
Ten en cuenta también que Azure ofrece diferentes tipos de balanceadores de carga según tus necesidades. Como el Azure Load Balancer (a nivel de transporte, capa 4, que es más económico y adecuado si no necesitas una inspección profunda del tráfico) y Azure Application Gateway (a nivel de aplicación, capa 7, que tiene un coste mayor y que es más adecuado cuando necesitas realizar balanceo en función del contenido de las solicitudes HTTP/HTTPS). Utilizar el tipo correcto puede marcar una diferencia importante a nivel de costes.
Por ejemplo, si tu aplicación requiere distribución avanzada basada en reglas HTTP, como la asignación de tráfico a ciertos recursos según la URL solicitada, entonces Azure Application Gateway sería el más adecuado a pesar de suponer un coste más elevado. Pero si solo necesitas distribuir tráfico a varias instancias y no necesitas realizar tareas de mayor complejidad, entonces Azure Load Balancer estándar sería una opción suficiente y más rentable.
7. Monitoriza continuamente con Azure Cost Management + Billing
Azure proporciona una herramienta integrada llamada Azure Cost Management + Billing, que te ayuda a controlar y analizar los gastos en tiempo real. Con esta herramienta puedes:
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Establecer presupuestos: Puedes definir límites de gasto y configurar alertas para que te notifiquen cuando te estés acercando a tu presupuesto mensual.
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Segmentar costes por proyectos, equipos y departamentos : Mediante el uso de tags puedes clasificar los recursos y hacer un seguimiento detallado de los gastos por cada iniciativa y área de trabajo.
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Evaluar tendencias de costes: Analiza las tendencias de uso y gasto a lo largo del tiempo para identificar patrones y posibles áreas de optimización.
8. Usa Azure Hybrid Benefit
Si ya tienes licencias de Windows Server o SQL Server con Software Assurance, puedes usar Azure Hybrid Benefit para ahorrar en costes de licencias. Esta ventaja permite trasladar tus licencias existentes a la nube de Azure y ahorrar hasta un 85% en ciertos servicios.
9. Considera servicios sin servidor (Serverless)
Para aplicaciones con patrones de uso intermitente o impredecible, el modelo serverless puede ser una excelente opción de ahorro. Azure Functions y Azure Logic Apps permiten pagar solo por el tiempo de ejecución de tus funciones, en lugar de tener infraestructura dedicada siempre en ejecución. Esto es ideal para aplicaciones basadas en eventos o que tienen tiempos de inactividad prolongados.
Conclusión
La optimización de costes en Azure es un proceso continuo que implica monitorización, ajuste y una comprensión clara de las necesidades de tu negocio. Con las herramientas y prácticas adecuadas, puedes aprovechar la flexibilidad de la nube sin que tus costes se disparen. Desde seleccionar el tipo correcto de recursos hasta aprovechar instancias reservadas y servicios serverless, Azure ofrece múltiples formas de ajustar tu inversión y mejorar la eficiencia.
A medida que crezca tu infraestructura en la nube, es crucial realizar auditorías periódicas de los costes y ajustar tu configuración según sea necesario para garantizar que obtienes el máximo valor de Azure sin gastar de más.